EL MAL: Los Depredadores - Los Illuminati

No puedo hablar de algo que no se y si digo algo es porque tengo una evidencia incuestionable.
Pero, ¿qué podemos saber cualquiera de nosotros respecto de lo que hay y de lo que no hay?
Si vinieran aquí visitantes estelares de hecho nada sabrían ni entenderían tampoco.

Lo que sí está fuera de discusión es que suceden cosas muy malas.
Se dice que algunos inventaron la versión de la Conspiración, que consiste en creer que todo lo malo que sucede está relacionado entre sí y forma parte de un plan diabólico para robarnos las tierras y la autonomía, abusarnos, sacarnos el dinero, usarnos la energía laboral y aprovecharnos de diversos modos, aún sexualmente. Nos chupan la sangre, metafórica y textualmente. Pero no es raro que el hombre use al hombre, ya que usa a todo lo demás.

Se dice que formarían parte de la Conspiración los horribles programas de TV, la comida chatarra, la educación intencionalmente mal impartida, la medicina intencionalmente mal suministrada. Educación que no educa, medicina que no cura, gobiernos que buscan el beneficio personal y jamás el bienestar general. Y para explicarlo todo ponen excusas y excusas...

Alguien lo hace.
Si están coordinados entre ellos, no lo sé. Si el mal responde a la iniciativa privada e individual, no lo sé.
Si alguien lo sabe, o cree saberlo, por favor infórmelo.

Nosotros tuvimos a Facundo Cabral, finalmente asesinado por los grises, o los Illuminati, o los reptilianos.

Él denunciaba a viva voz a los tramposos religiosos monetaristas, a los presidentes barrenderos serviles de los intereses ajenos, a los burladores y estafadores de la fe pública.
Desenmascaraba a los malos, a los torpes, a los ignorantes, a los sabios mal intencionados.
Mostraba la cara de los dictadores y esclavizadores, de los cerdos vestidos de corbata, vestidos de señores.
Acompañaba y consolaba a los que sudaban lágrimas y sangre; a los que sufrían y agonizaban su futuro consumido. Cantaba y hablaba por los que no tenían palabras; los campesinos que viajaban monte adentro; los trabajadores en el surco del dolor; las madres embarazadas de tristeza por el hambre producida por los malos gobiernos; las niñas violadas de pobreza; los estudiantes a quiénes obligan a estudiar las mentiras de los hombres, y a aprender falsas enseñanzas con las que los engañan.

¿Todavía alguien cree que lo mataron por error?